Esto era una vez, un bosque muy grande y muy bonito, lleno de árboles de muchos tamaños y muchos colores.
Tenía hasta un caminito, pero nadie sabía a dónde iba, pues hacía mucho tiempo que nadie iba por él.
Además de los árboles y el caminito, también había animalitos.
Ciervos, ardillas, osos, pajaritos de muchos colores, pavos reales, con unas colas como abanicos, maravillosas, patos... Ha! se me olvidaba! También estaba allí el Sr. Búho, que decían era muy sabio...
Pero estaban muy aburridos. Allí nunca pasaba nada interesante. Siempre lo mismo.
Tan aburridos estaban, que pensaron en irse a vivir a otro sitio.
Antes, se reunieron para hablarlo, pues también les daba pena separase, eran tan amigos!!!
Entonces dijo la Señora Cigüeña, que por su trabajo viajaba mucho, claro:
-Pues, yo he visto otros sitios donde hay gente.
-¿Gente? y ...¿eso qué es? preguntó una ardillita
-Pues algo así como el Sr. Oso, cuando está de pie.
-Dos brazos, dos piernas, pero sin pelos...
-Tienen pelo en la cabeza y el cuerpo de colorines-
Entonces dijo el Sr. Búho.
-Un pariente mío, que vivió en muchos sitios distintos, ya me dijo que los había visto, pero me dijo que se llamaban niños.
- Y que sobretodo, chillaban mucho, y armaban mucho alboroto!
Si, pero ¿cómo vamos a encontrarlos?
Un duende del bosque, que andaba por allí les dijo:
-No os preocupéis, yo os puedo ayudar.
-Siempre habéis sido mis buenos amigos...
-Pero con una condición:
Todos lo miraron con los ojos muy abiertos, con mucho interés...
-La condición es, que como se está haciendo de noche, os vayáis todos a vuestras casas, cerréis la puerta y las ventanas y no salgáis aunque escuchéis ruidos, o lo que sea.
-De acuerdo, respondieron todos.
-Palabrita de amigos.
Entonces, cumpliendo su promesa, su palabrita, se fueron a sus casas, cerraron las puertas y ventanas e incluso se pusieron algodones en los oídos.
Pasó toda la noche y cuando amaneció, salieron todos de su casa, y se quedaron con la boca abierta... sorprendidos...
Allí había algo maravilloso.
Un parque enorme, en donde había de todo.
Columpios, toboganes, tubos, caballos de muelles... y todo pintado con unos colores maravillosos!!!
Rojo, azul, verde, amarillo, blanco...
Y un gran cartel que decía:
PARQUE INFANTIL
Pero... sigue sin haber nadie. Todo está igual de silencioso!!!
De repente, el Sr. búho dice SSSHHHHHH!!!! que se oye un ruido diferente!!!!
Brrrrrruuummm, brrrrummmmmm, pi, piiiiiiiiiiiii!!!!
Y ven llegar unos autobuses, que se pararon al lado del cartel.
Se abriron las puertas y.....
Siiiii!!!!!
¡Era verdad lo que había dicho la señora cigueña!¡
Bajaron un montón de niños, con ropas de muchos colores...
Unos tenían el pelo rubio, otros negro, otros pelirrojo...
Pero todos chillaban mucho de alegría y se reían mucho.
Y cantaban y saltaban...
Caray, que divertidos eran!!!!!
Y se subieron a todos los juegos del parque infantil....
Y sus risas se oían desde todos los sitios del bosque.
Y nunca más ese bosque fué triste....
Porque todos los dias venían los niños a jugar.
Y todos los animalitos del bosque volvieron a ser felices... Y colorin, colorado...este cuento se ha terminado
Luna-
5 comentarios:
Priiiiiiiiiiiiii!!! Sí, llegué primera a jugar al parque con todos los niños! Qué lindo cuento, Luna. Imagino a tus nietas oyéndote atentamente, jaja.
Te dejo un besote enooooorme. disfruté mucho la lectura del cuento.
Me ha encantado tu cuento Luna, la alegria y las risas de tus nietos se transfunden a tus cuentos.¡¡que suerte tener una abuela que inventa historias para ellos!!
Pues si alli estaba el Sr. Búho, tengo que vistitar ese bosque.
Pasame la dirección
;)
Y los mayores no podemos ir a ese parque? :(
UN BESAZO ;)
Que gozada volver a disfrutar tu sitio con encanto... de las fotos que nos hacen viajar y soñar
Te dejo mis besos de colores y millones de gracias por compartir
Publicar un comentario